Cultivo de cannabis: Crecimiento vegetativo
En este post vamos a ver el crecimiento vegetativo de las plantas de cannabis atendiendo a sus necesidades según el tipo de cultivo, ya sea este de exterior o interior. Esta fase comienza en ambas modalidades cuando nuestra planta despliega los cotiledones (las dos primeras dos “hojitas”). Algo básico y común a ambos es la elección del sustrato que sea bueno y rico en nutrientes para que en los primeros riegos sólo sea necesario usar agua y un estimulador de raíces tipo
Roots Explosion o compuestos bacterianos como
Bactohemp,
Piranha,
Tarántula o
Bio-tonic. Los estimulantes líquidos y las bacterias que colonizan las raíces ayudan a alimentar y proteger de otros hongos y bacterias dañinos a la planta. Unas raíces fuertes y sanas ayudan a la producción de la clorofila necesaria para obtener plantas con un follaje verde y denso.
CRECIMIENTO VEGETATIVO EXTERIOR
El cultivo clásico es el que comienza con la siembra en la primavera y concluye con la cosecha en el otoño, aunque en lugares más cálidos con un clima mediterráneo benevolente, donde las temperaturas raramente bajan de los 8º se pueden realizar hasta tres cosechas al año.
Cuando la planta está comenzando su desarrollo es muy sensible y debemos controlar las condiciones meteorológicas y la luz que reciben no vayamos a estropearlas por un exceso de luz o un cambio brusco del clima, por ello aconsejamos al principio tenerlas en macetas de pequeño tamaño entre 0,25 y 1 litro que en caso de urgencia pueden ser trasladadas con facilidad. El momento óptimo para ser trasplantada a un tiesto de mayor tamaño será cuando observemos que las raíces comienzan a asomar por la base de la maceta, esto significa que la masa radicular ha formado un cepellón que ocupa por completo el pequeño espacio donde está ubicada. La maceta que elegiremos como destino final de la planta deber tener unas dimensiones mínimas de entre 7 y 10 litros de capacidad.
Como hemos dicho al principio es muy importante usar una tierra fértil y disponerla en el tiesto sin apelmazar para q la raíz se aireé adecuadamente sin ser aplastada. Debemos ser conscientes que después de un trasplante la planta se estresa y por tanto es conveniente durante unos días protegerla del viento y de las inclemencias del tiempo a la vez que le proporcionamos una luz suave.
A partir de la 3º o 4º semana de crecimiento es el momento idóneo para comenzar a usar un abono durante el riego hasta la etapa de floración. Lo primero que debemos hacer es
verificar el pH de nuestra agua con medidor especifico como el medidor simple
Ph Test Kit o
medidores digitales). El pH del agua debe estar en unos valores comprendidos entre 6,7-7,2, si es menor o mayor debe corregirse con un producto indicado para ello y a continuación echar el abono en el agua. Si midiéramos el pH del agua con el abono incluido, este podría alterar los parámetros acidez, por eso es recomendable añadirlo después.
Existen diversas marcas de abono de crecimiento en el mechado:
Biogrow,
Grow Explosion,
Bio Vega,
Alga grow, etc. Ya que en general los abonos de crecimiento tienen una mayor proporción de nitrógeno en su composición. Es muy importante respetar las dosis y la frecuencia de uso indicada por el fabricante para no sobrefertilizar o “quemar” la planta.
Otro aspecto importante es el riego de la planta, para ello debemos tener en cuenta que la medida idónea de agua es aproximadamente 1/3 de la capacidad de la maceta. Por ejemplo si tenemos una maceta con una capacidad de 10 litros debemos aplicar 3,5 litros de agua y verterla pausadamente. Hasta que la tierra no esté completamente seca no debemos volver a regar, para esto basta con introducir un dedo en la tierra y que esta no se adhiera a nuestra piel.
CRECIMIENTO VEGETATIVO INTERIOR
En el cultivo indoor (interior) el cultivador es quien controla todos los factores necesarios para un desarrollo óptimo de la cosecha. Al no haber luz solar somos nosotros quienes debemos ajustar la luz para conseguir un fotoperiodo que estimule el crecimiento y la floración. Los intervalos de luz que debemos realizar durante la fase de crecimiento no deben durar más de 4 ó 5 semanas, ya que esto supondría perder el control sobre el tamaño de las plantas, ya que si estas crecen demasiado, la luz no llegaría a las parte bajas de la misma. Las plantas crecen mientras que las horas de luz sean mayores que las horas de oscuridad. Por eso, únicamente durante el crecimiento se debe establecer un mínimo de 18 horas de luz y 6 de oscuridad. Cuando llegue el periodo de floración cambiaremos el fotoperiodo a 12 horas de luz y 12 horas de oscuridad a excepción de las plantas automáticas que su fotoperiodo será el mismo durante el crecimiento y la floración. Junto al control de la luz debemos tener presente y controlar la humedad y la temperatura, una herramienta imprescindible para el cultivo indoor es el termohigrometro. La humedad debe mantenerse entre un 40% y un 60%, para ello utilizaremos si fuera necesario humidificadores o deshumidificadores dependiendo de las condiciones específicas del entorno. Sobre la temperatura debemos saber que debe estar entre los 19º y los 25º, la cual controlaremos con una buena ventilación, incluso con un aparato de aire acondicionado (frio o calor) en las zonas con temperaturas más extremas. En zonas muy cálidas os aconsejamos no cultivar en verano, a no ser que tengas muy en cuenta todas estas premisas y ejerzas un control total sobre la temperatura.
El trasplante, abonado y riego del cultivo del interior es el mismo que aplicamos en el exterior. El cambio de abono de crecimiento por un abono de floración no debemos hacerlo cuando cambiemos el fotoperiodo, sino cuando observemos una floración evidente en las puntas de las ramas.
Os dejamos una tabla para que dependiendo del tipo de bombilla; de la cantidad de plantas que tengamos y en qué fase de crecimiento se hallen conozcamos las medidas estándares que debe haber entre la planta y la bombilla para evitar que se quemen y la luz les llegue a todas por igual. Un consejo si tenemos varias plantas bajo un mismo foco es bueno mover las plantas periódicamente de los extremos al centro durante la fase de crecimiento para que a todas las plantas llegue la luz por igual.
Tabla distancias de colocación de plantas bajo la bombillaTIPO Y POTENCIA DE LAMPARA | HPS 100/150W. | HPS 250 W. | HPS 400 W. | HPS 600 W | HPS 1000W | LED Y CFL |
1º FASE PLANTULA | 25-30cm | 30-35cm | 60-65cm | 70-75cm | 80-90cm | 20-25cm |
2º FASE CRECIMIENTO Y FLORACIÓN | 20cm 3-5 plantas en un área de 50x50cm | 40cm 6-8 plantas en un área de 80x80cm | 50cm 10-12 plantas en un área de 100x100cm | 60cm 12-15 plantas en un área de 120x120cm | 100cm 15-20 plantas en un área de 150x150cm | 15-20cm Dependiendo la potencia de la lámpara |
LA PODA
Tanto en el cultivo interior y exterior en la fase de crecimiento podemos practicar una o varias podas a la planta, aunque algunas variedades como la mayoría de indicas puras y autoflorencientes no conviene podar en ningún caso. El objetivo de la poda es redireccionar las hormonas de crecimiento de la rama principal a las ramas inferiores. Cuando vayas a podar asegúrate de tener bien limpias las manos y el
instrumental que vayas a usar: tijeras, navaja, cuchilla, podadora…etc. Porque a simple vista no serás consciente de la cantidad de esporas, hongos y microbios que podrían afectar la planta. Efectúa los cortes en un ángulo de 45º para evitar la humedad en las heridas. No realices nunca la poda las 3 ó 4 semanas anteriores a la floración porque luego esta se demorará durante semanas. Y tampoco podes las hojas, estas son necesarias para producir mediante la fotosíntesis la mayor cantidad de clorofila. Si podas ha de ser por una motivación concreta, podar por podar no sirve de nada.
Tipos de Poda
1. Poda FIM “Fuck I missed”: Aquí únicamente cortaremos la guía de la planta que es el primer grupo de hojas del tallo central con el propósito de hacer que la planta se haga menos alta y más robusta por los laterales.
2. Con la Poda Apical conseguiremos un mayor desarrollo lateral al mismo tiempo que la guía central se bifurcará en dos brazos centrales.
3. La Poda Lateral ayuda a que la planta se haga más alta, excepto en cultivos a largo plazo donde también aumentará su envergadura, para ello debemos cortar todas las puntas de las ramas laterales.
4. Poda Inferior de las ramas innecesarias más bajas que no reciben luz para potenciar el crecimiento de su estructura superior.
Existen otras variedades de control de altura y forma de las plantas, menos agresiva que la poda y se conoce en inglés como: Low stress training (LST) y existen varias técnicas:
A. Consiste en colocar unos clavos en los laterales de la maceta y atar las ramas mediante cuerdas para conseguir que la planta no crezca hacía arriba.
B. Quebramos las ramas sin llegar a cortarlas, así con el paso de los días la planta formará un callo en el punto de rotura y después continuará su crecimiento normal. Pero será útil para contener el crecimiento de la planta sin necesidad de poda.
C. Pellizcamos con una presión media utilizando las yemas de los dedos sobre los ápices de las distintas ramas. Ayudando a contener el crecimiento vertical y favoreciendo el desarrollo horizontal de la planta.
Imágenes: Cortesia de Paradise-seeds